domingo, 4 de diciembre de 2011

La mirada del siglo XX

FRANCE. Normandy. Seine-Maritime. Dieppe. 1926
En Fotografiar del Natural, el instante decisivo y una nota, Henri Cartier-Bresson afirma: " a la vez que descubrimos el mundo exterior; este mundo nos da forma, pero también podemos actuar sobre él. Debe establecerse un equilibrio entre esos dos mundos, el interior y el exterior que, en un diálogo constante, forman uno solo, y ese es el mundo que debemos comunicar". Esencialmente, esto es lo que Cartier-Bresson hace en su texto, equilibrar su mundo interior con (su) mundo exterior, es decir, cuenta la relación que la fotografía ha tenido con su vida.
Desde el principio, el fotógrafo identifica a la cámara como un mero instrumento en el que simplemente se refleja en una película lo que vemos en nuestra cabeza. Para Cartier-Bresson la verdadera fotografía está dentro de nosotros y sale a la luz cuando "cabeza, ojo y corazón están en el mismo punto de mira".


FRANCE. The Var department. Hyères. 1932
El fotógrafo define el reportaje como "operación progresiva de la mente, del ojo y del corazón para expresar un problema, para fijar un acontecimiento o impresiones sueltas", al captar  momentos irrepetibles, efímeros, el fotógrafo necesita una velocidad de ejecución mayor que la de cualquier otra forma de expresión artística. Por otra parte, Cartier-Bresson se acerca a la empatía de la que hablaba Capa, "si una foto no es buena es porque no estabas suficientemente cerca" al explicar que debemos comprender y formar parte del contexto en el que se encuentra aquello que fotografiaremos, según el francés, lo ideal es "hacernos invisibles". Como padre del fotorreportaje, Cartier-Bresson se centra en otros temas como el tema, apartado en el que explica que lo más difícil es escoger entre una serie de hechos o temas seleccionados. En un fotorreportaje debe establecerse una relación entre las personas retratadas y la mente del propio fotógrafo, creándose el equilibrio, al que al principio nos referíamos, entre mundo interior y exterior. En los apartados composición y técnica, el fotógrafo vuelve a hacer hincapié en su idea de que la verdadera foto la llevamos dentro, composición y técnica son solamente herramientas que nos ayudan a expresar lo que queremos.

FRANCE. Paris. Place de l'Europe.
Gare Saint Lazare. 1932

A continuación, el francés habla sobre la responsabilidad del reportero, que no es otra que la de ofrecer a la gente la información que demanda. Lo que prácticamente significa que las grandes audiencias ven la realidad a través de lo que el reportero ha visto. Aquí ganan enteros las posiciones del redactor jefe y del compaginador, quienes a veces destruyen, al disponer las imágenes de una determinada manera, el contenido y la forma que obtuvo el reportero. En una postdata añadida en 1985, el fotógrafo francés le da al color una gran importancia a la hora de transmitir información.

Biografía:
Henri Cartier-Bresson fue un célebre fotógrafo francés (nacido el 22 de agosto de 1908 en Chanteloup-les-Vignes, cerca de París, y fallecido el 3 de agosto de 2004 en Céreste) considerado por muchos el padre del fotorreportaje. Criado en un ambiente artístico y burgués empezó a interesarse pronto por la fotografía y a los 23 años adquirió una camara de segunda mano en la Costa de Marfil, con la cual hizo sus primeras fotografias. Mas tarde, cautivado por la Leica que adquirio en Marsella, comenzó a dedicarse a la fotografia de una manera mas profesional, llegando incluso a considerar a su cámara como una parte de su cuerpo. 

Su primera exposición se inauguró en 1932 en la Galería Julien Levy de Nueva York, además ese mismo año publicó también su primer reportaje en la revista Vu. A lo largo de su carrera, tuvo la oportunidad de retratar a personajes de la talla de Pablo Picasso, Henri Matisse, Marie Curie, Édith Piaf, Fidel Castro y Ernesto Guevara. También cubrió importantes eventos, como la muerte de Gandhi, la Guerra Civil Española, donde filmó el documental sobre el bando republicano "Victorie de la vie", la Segunda Guerra Mundial, en la que estuvo en la Unidad de Cine y Fotografía del ejército galo o la entrada triunfal de Mao Zedong en Pekín. 

En 1947 fundó la Agencia Magnum a Robert Capa, Bill Vandivert, David Seymour y George Rodger. Además, fue el primer periodista occidental que pudo visitar la Unión Soviética tras la muerte de Iósif Stalin.
Abandonó Mágnum en 1966 volviendo al dibujo y la pintura, aunque siguió con la fotografía.
Hablando de su técnica jamás recortó los negativos, se positivaron completos, sin encuadrar ni cortar nada. Es un fotógrafo que sabe componer con rigor, observando los gestos, las yuxtaposiciones de elementos y dispara en el breve instante en que todo ello crea un conjunto significativo, lo que él define como el momento decisivo, sus "images à la sauvette".
Fallece en 2004 en Montjustin, al suroeste de Francia.

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