Pepe Baeza (1955, Valencia) ha trabajado como fotógrafo de
prensa y editor fotográfico en periódicos como El Periódico de Catalunya, El
Observador o La Vanguardia, donde es actualmente el redactor-jefe y editor de fotografía
del suplemento dominical Magazine. Además de esto, es profesor y doctor en
Ciencias de la Información por la UAB.
Durante la conferencia, Pepe Baeza defendió el
fotoperiodismo como una parte de la fotografía documental identificándola como
un ‘‘testimonio de la realidad’’, básico para la prensa y para la comprensión del
mundo que nos rodea. Sin embargo, el fotoperiodismo se encuentra actualmente
inmerso en una crisis desde hace ya más de tres décadas y su futuro tampoco
pinta muy claro. La culpa de esta
crisis se encuentra fundamentalmente en los
grandes poderes financieros que con la creación de grandes agencias y
multinacionales está acabando con las pequeñas agencias de fotografía y su
mirada crítica, independencia y libertad de expresión. Actualmente, el capital
mueve los medios que son vistos más desde el punto empresarial que desde el de
la libertad de información, básica en las sociedades democráticas. Las dificultades
de financiación, los recortes o los despidos, que empezaron ya en época de
Reagan o Thatcher, son como mordazas a
la libertad de prensa y desprestigian el fotoperiodismo y su función. La prensa
además, está cada vez más vinculada al entretenimiento lo que hace que ‘‘bajen
sus cuotas de realidad’’, asegura el fotógrafo. A este hecho no ayuda la nueva incursión
de la publicidad en el fotoperiodismo que toma ejemplos de fotografías reales
para hacer sus campañas consiguiendo crear así un sentimiento de desensibilización
del público cuando se enfrenta a fotografías impactantes en los medios. Pepe además
aseguraba que ‘‘actualmente, hay que convertirse en artista para vender imágenes
y, sin embargo, aunque la estética sea importante no hay que olvidar que la
verdadera función del fotoperiodismo es testimonial’’.
Además de todo esto, la concepción del fotoperiodismo dentro
de los propios medios ‘‘está cada vez más devaluada’’. Ni siquiera dentro del ámbito
periodístico existe un fuerte apoyo a la importancia del testimonio gráfico que
pasa a ser un mero acompañante de la noticia. ‘‘Esta infravaloración y sobreexplotación
de los fotógrafos lo único que está consiguiendo es el fin de la calidad’’
asegura Baeza. El futuro del fotoperiodismo y la prensa en general como algo
independiente y crítico de los actos ilegales está cayendo en desuso. Los medios
están cada vez más bajo el yugo del dinero y es posible que la única solución a
este problema sea la creación de sitios independientes en los nuevos medios que se dediquen verdaderamente
a informar y no a cumplir las exigencias de los de arriba.
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